El sistema ISOFIX es un estándar internacional que se utiliza para fijar las sillas de bebé al coche de forma segura y sencilla. Este sistema, que se implementó a partir de 2004 y es obligatorio desde 2012, incluye puntos de anclaje en la carrocería del coche que permiten fijar la silla directamente a la estructura del vehículo. Esto asegura que la silla quede firmemente sujeta, en lugar de depender solo del cinturón de seguridad, lo que proporciona una mayor estabilidad y seguridad en caso de accidente.